Esta casa se sitúa en un terreno con pendiente pronunciada en las colinas que rodean el balneario de zapallar, en la zona central de Chile. El clima es seco y soleado en verano, frío y lluvioso en invierno. La casa está orientada hacia el norte, con vistas panorámicas del océano y los cerros vecinos.
Un zócalo de hormigón armado, que incluye la piscina, establece la relación entre el terreno y el plano de la casa. El piso principal consiste de un salón flanqueado por dos terrazas como extensión visual y funcional además de establecer un doble circuito de circulación que incluye el dormitorio principal y la cocina. Todos los paramentos vidriados del salón y sus respectivas celosías desaparecen completamente en los muros, para hacer de salón y terrazas un sólo gran espacio al aire libre. El juego de vanos y llenos permite además un grado de control frente al sol, los elementos y las vistas. En el piso superior se ubican las dependencias de visitas. El acceso se plantea en el descanso central de la escalera para dar cuenta de la pendiente natural del terreno.

(extracto de la publicación en www.chilearq.com)